Radiografía del profesor emprendedor

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Una vez publicado el manual «Lean Startup en Educación«, pasaré a detallar algunos de sus aspectos clave en varios posts, de tal manera que amplíen la información del texto, y sobre todo, las infografías que forman parte del mismo.

Estamos en el siglo del emprendimiento. Debemos desarrollar habilidades para que nuestros chic@s puedan dar respuestas a los desafíos que nos presenta la sociedad, sociedad en vertiginoso cambio. Pero considero que es fundamental que la figura del docente también tenga esa dosis de emprendedor, que le permita dar respuesta a una profesión que no sólo se ve afectada por el momento que vivimos, sino que también supone el reto de educar a loa ciudadanos del futuro. Entonces, que ¿características debe tener un profesor emprendedor? Señalo 13 notas básicas, organizadas de la siguiente forma:

  1. El emprendimiento se trabaja en todos los niveles educativos, tanto obligatorios como no obligatorios. Sólo así podemos afirmar que nuestro alumno, cuando deje el sistema educativo, estará provisto de las herramientas necesarias que precisa para insertarse en nuestra sociedad con competencia.
  2. Es fundamental programar. Puede parecer obvio pero con el vertiginoso cambio, saber los retos y/o unidades a presentar y lo que tenemos que conseguir y evaluar es clave a la hora de abordarlos. Y sobre todo, sabiendo que hay infinidad de recursos variados y motivadores que ayudan en gran medida en el aula. Dentro de este aspectos, es muy importante tener en cuenta:
    1. Secuencia del aprendizaje: respetar la secuencia del aprendizaje. Partir de lo general, a continuación análisis, y por último síntesis de lo tratado. Y esto es así para cada unidad programática, ya sea el curso,el trimestre, la unidad o reto y cada sesión.
    2. También es importante partir de actividades sencillas y de corta duración, para ir avanzando a actividades cada vez más difíciles, pero siempre superables, y de mayor duración.
    3. Niveles de conocimiento. Al plantear un reto o unidad, nuestro alumnado tiene que saber cómo enfrentarse al problema, y sobre todo, en ese proceso, será muy importante obtener información que le permita resolverlo. Por niveles, podríamos tener en cuenta las siguiente fuentes de información:
      1. Partir de los conocimientos previos del alumnado
      2. Saber buscar información en la red
      3. Usar la técnica de observación
      4. Realizar entrevistas para conseguir información de primera mano
      5. Plantear hipótesis y contrastarla en la calle, donde verdaderamente están los hechos
  3. Pasar a la acción. En educación no se puede tener una actitud pasiva, simplemente porque es propio de otra época. Ahora es preciso el trabajo del alumno de forma intensa a lo largo de todo el proceso de aprendizaje. El alumno aprende haciendo. En este sentido, será muy importante:
    1. Salir a la calle. Un emprendedor no puede emprender en el aula. En el aula se establece la guía para emprender, se orienta al alumno, y se establecen hipótesis. Pero será el cliente, y salir del edificio lo que nos permita aprender.
    2. El papel de los contenidos. En este sentido se ve muy claro como los contenidos del currículo son el instrumento que tenemos para trabajar en aula y fuera de ella, pero sólo sirven para conseguir desarrollar las habilidades y competencias clave.
  4. Estar en beta permanente. Cada día hay nuevos recursos, nuevas aplicaciones, nuevas experiencias compartidas en la redes por parte de compañeros. Siempre se puede aprender, y hay que estar en actitud de hacerlo. Es un trabajo duro, pero simplemente hay que hacerlo para dar la mejor respuesta a nuestro alumnado. En este sentido podemos afirmar que:
    1. Disponer de la propia caja de herramientas que le vamos a tratar de dar al alumno, esa caja de herramientas formada por creatividad, comunicación, cooperación y confianza. La cuestión es clara: un profesor puede desarrollar habilidades emprendedoras en el alumno, si realmente dispone de esas mismas herramientas. No se puede trabajar la creatividad sin ser creativo, cada uno a su nivel.
    2. Flexibilidad. En el manual se proponen una serie de dinámicas o actividades de trabajo. En cualquier caso, sólo es una propuesta, una recomendación, que el docente deberá adaptar al aula según su experiencia, implicación, tipo de alumnado y otras circunstancias.
  5. Profesor mentor. Con todo lo que hemos analizado hasta aquí, la nota final se basa en asumir que el papel del docente es de mentor. Orienta el proceso de aprendizaje del alumnado en función de sus necesidades, inquietudes e intereses. Guía y orienta en el proceso, donde el agente activo, como hemos mencionado anteriormente es el alumno. En este sentido, podemos añadir dos cuestiones de relieve:
    1. Mayor facilidad para atender a la diversidad. Trabajar emprendimiento no se puede entender si no es en grupo, y en nuestro caso, sugerimos aprendizaje basado en proyectos, restos o problemas. Esto hace que el profesor pueda dedicar más tiempo en aula a los alumnos que más lo precisen, sean por estar por debajo de la media, o sean por estar por encima de la media. Estamos hablando de individualizar la enseñanza.
    2. Trabajo gamificado. Es clave que el trabajo propuesta se convierta en un juego. Las dinámicas que proponeos no son más que juegos adaptados o adaptables a la edad de los alumnos para que disfruten de todo el proceso, y con ello, se impliquen y den lo mejor de sí mismos porque realmente les interesa.

Bien, esta es la explicación de los deferentes items que componen la infografía de un profesor emprendedor. ¿Qué te parece? ¿Añadirías alguno más? ¿propondrías algún cambio? Haz los comentarios que consideres pertinentes y todos aprenderemos un poco más.