MADURACIÓN DE IDEAS
Una vez que hemos filtrado las ideas, ideas que provenían de la fase emocional, sin níngún límite en su generación, procederemos a estudiar cada idea. Con estudiar cada idea nos estamos refiriendo a tener información sobre la misma con el fin de poder elegir la mejor y descartar aquellas ideas que sean menos interesantes.
Para ello se establecen, al menos, los siguientes aspectos a conocer de cada idea:
- Descripción detallada de la actividad, teniendo en cuenta la información que se tiene al comienzo del proyecto. Esta descripción variará en mayor o menor medida según avance el estudio del proyecto.
- Novedades que aporta la idea, ya sea en la zona, ya sea a nivel empresarial.
- Tipo de necesidades de cubre. Es importante conocer la Teoría de Maslow, en cuanto a la jerarquía de necesidades que establece.
- Mercado al que va dirigida. Nos referimos al tipo de cliente que consumirá el producto.
- Virtudes o defectos para un posible prototipado.
- Inversión aproximada.
- Fuente de información.
- Otras.
Una vez conocida esta información mínima se hace necesario valorar cada aspecto en cada una de las ideas. Fruto de esa valoración, sabremos qué idea tiene una mayor puntuación, y por lo tanto será, en principio, la elegida.