¿Por qué usar Design Thinking en nuestro proyecto de emprendimiento?
Tras la formación de los equipos, y con la idea clara de desarrollar nuestro Entorno Personal de Aprendizaje, comenzamos nuestro proyecto de emprendimiento. Y lo hacemos con Design Thinking. Pero, ¿por qué usamos Design Thinking?
En el post [Aplicando Design Thinking a nuestro proyecto] expuse cómo iniciamos nuestro proyecto de emprendimiento de forma práctica. Y en ese proceso, Design Thinking es la clave.
Ahora, voy a centrar este post con el objetivo de conocer el método. Design Thinking es una de las metodologías que más se usan en la actualidad para innovar. Está ligada a la fase inicial del proceso de emprendimiento, aunque una vez asumida la forma de trabajar, forma parte de nuestras actuaciones con total seguridad. De forma gráfica, podemos mostrar cómo ubicar Design Thinking en nuestro proyecto, y su relación con otras metodologías que vamos a emplear:
Posteriormente abordaremos el proceso para trabajar Design Thinking, pero ahora quiero centrarme en el fundamento del mismo.
La idea previa a entender está relacionada con el momento que vivimos y la necesidad de innovar, de resolver problemas de forma innovadora. E innovación está relacionada con emoción. Si la innovación está referida a algo nuevo que la gente quiera, la emoción significa tener muy presente a la persona a la que va dirigida. Es clave, es fundamental conocer a la persona a la que va dirigida nuestra solución.
Por ello, hay una clave fundamental: asumir un mindset, una actitud, una forma de pensar, de ver las cosas: abierto, escuchar de forma empática, sacar las cosas de sus cauces habituales. Y hablamos de actitud porque así es más fácil dar con una verdadera innovación.
Vamos a profundizar en esa actitud que es fundamental desarrollar. Y para ello, partimos de una imagen que sintetiza los principios fundamentales que luego desarrollaré:
Estamos hablando de 7 ideas clave:
- Focaliza en las personas: en general pensamos en nosotros, y eso nos lleva a hacer cosas que nadie quiere.
- Cuenta historias: porque entendemos el problema mejor con una historia. Se trata de ponerse en su piel y así llegas a entenderle mejor.
- Se visual: porque ayuda a encontrar la innovación.
- Construye para pensar: hacemos prototipado rápido porque ayuda para pensar, y no al revés.
- Pasar a la acción: no hay nada mejor que hacerlo, hacer las cosas suele ser el mejor maestro, con ciertas bases.
- Colaboración radical: se trata de facilitar que hay equipos que trabajen. Un buen equipo es la clave del éxito, al menos en fases iniciales, y es un excelente foco para innovar y encontrar valor.
- Gestión del caos: vamos a generar mucha información, muchas ideas, que podemos considerar importantes, por lo que se hace obligatorio seguir un proceso: ordenar, priorizar…
Estas reflexiones y el proceso completo de Design Thinking puedes encontralo en una mini guía que edita la Universidad de Standford, en el siguiente link.